El Sindicato Médico de Ceuta (SMC) ha lanzado un contundente llamamiento al Ministerio de Sanidad ante la “crítica situación” que atraviesa el servicio de radiodiagnóstico del Hospital Universitario de Ceuta (HUCE), que, según advierten, podría colapsar en los próximos meses por la falta de especialistas.
A pesar de los anuncios realizados por el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) sobre nuevas infraestructuras y equipamientos —incluida la incorporación de una resonancia magnética de última generación— el sindicato denuncia la ausencia de medidas efectivas para reforzar la plantilla médica, lo que pone en riesgo la atención sanitaria en la ciudad autónoma.
Según el SMC, la aprobación del Real Decreto 118/2023, que cataloga los puestos del Ingesa como de difícil cobertura, debería haber permitido la aplicación de incentivos para atraer a nuevos profesionales. Sin embargo, a diferencia de otras comunidades como Baleares, en Ceuta no se han implementado acciones concretas para mejorar la situación.
Plantilla reducida y sobrecargada
En el caso específico del servicio de radiología, la situación es especialmente alarmante. Aunque las memorias de Ingesa reflejan una plantilla teórica de siete radiólogos, en la práctica solo cinco se encuentran en activo y únicamente cuatro están operativos. Uno de los profesionales permanece de baja, mientras que tres han tenido que prolongar su ejercicio más allá de la edad de jubilación para poder mantener el servicio.
La sobrecarga de trabajo es otro de los factores críticos señalados por el sindicato. Los radiólogos deben asumir múltiples funciones, desde la realización e interpretación de TAC, resonancias, radiografías y ecografías, hasta la cobertura de guardias para garantizar atención continua los 365 días del año. La reciente instalación de un equipo de resonancia magnética de 3 Teslas ha añadido aún más presión, ya que no ha venido acompañada ni de refuerzo de personal ni de formación específica.
Críticas a la externalización del servicio
El sindicato también ha criticado la decisión de Ingesa de derivar la interpretación de estudios radiológicos a empresas privadas, calificándolo como una “privatización encubierta” que pone en entredicho el control y la calidad de la atención. Esta práctica, que se está extendiendo a pruebas como TAC y ecografías, también afecta negativamente a la cohesión interna del servicio.
Otro punto de conflicto es la negativa reiterada a conceder la exención de guardias por edad a algunos facultativos, lo que está provocando un desgaste progresivo del personal y amenaza con dejar aún más descubierta la cobertura de turnos en los próximos meses.
Exigen medidas urgentes
Ante esta situación, el SMC ha solicitado la intervención urgente de la ministra de Sanidad para forzar a Ingesa a aplicar medidas reales que garanticen la captación y fidelización de profesionales en Ceuta. El sindicato ha expresado su disposición a colaborar en la búsqueda de soluciones, pero ha advertido que no permanecerá en silencio ante una situación que, de no abordarse con urgencia, puede comprometer gravemente la salud de los ciudadanos.
El SMC insiste en que el tiempo corre en contra del sistema y recuerda que el riesgo de colapso se intensifica a medida que se aproxima el periodo vacacional, cuando la demanda asistencial suele incrementarse y la disponibilidad de personal disminuye.
