El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Nº3 de Ceuta ha decretado el sobreseimiento libre y archivo de las diligencias en la denuncia de Susana Román contra Kissy Chandiramani por un presunto delito de falso testimonio y otro de falsedad documental.
Según el auto, en el supuesto que nos ocupa, «cabe concluir que las conductas de la investigada, a las que se refiere la denunciante, consistentes en faltar a la verdad en los documentos o en las declaraciones en calidad de testigo, no revisten -a juicio de este Instructor- la gravedad suficiente para poner en peligro el bien jurídico protegido por el tipo penal del delito de falsedad documental, ni por el delito de falso testimonio, no existiendo además en la presente causa indicios suficientes que permitan sostener que la investigada faltó deliberadamente a la verdad y que no se trataban de meras erratas o inconcreciones -como manifestó la propia investigada en su declaración en sede judicial en relación con el hecho primero al que se refiere
la denuncia, manifestando que hubo muchos variaciones en los integrantes de la Comisión de la Vivienda, siendo además que subsanó dicho error aportando a la causa penal las actas de todas la comisiones celebradas desde 2011 hasta 2015″.
Además se expone que «no se trata de que el testigo sea creíble, sino que debe faltar sustancialmente a la verdad de lo que le es preguntado, lo que no parece acaecer en el supuesto que nos ocupa». Por otra parte, «la querellante también denuncia declaraciones de la investigada en calidad de testigo que no parecen referirse a hechos, sino más bien a opiniones».
En segundo lugar, el juez concluye que «las actuaciones practicadas acreditan la inexistencia de indicios racionales de haberse perpetrado el hecho que ha dado lugar a la formación de la presente causa».
La consejera se ha defendido en todo momento diciendo que «se limitó a aportar la documentación que se requirió por parte de la autoridad judicial” y que su colaboración fue, “absolutamente leal teniendo en cuenta que los hechos que se encausan se produjeron antes de que fuese nombrada gerente de EMVICESA”.
La denuncia de Susana Román, una de las investigadas en el caso EMVICESA, fue presentada en mayo de este año, antes de las elecciones autonómicas donde Chandiramani iba como número 3 de la lista del PP.