Todo un acontecimiento para la ciudad, tal y como han puesto de relieve los consejeros, quienes han valorado los buenos resultados cosechados en las ediciones anteriores y la importancia que desde el punto de vista turístico tiene esta cita, que ha logrado consolidarse año tras año y que, con respecto a la edición de marzo pasado, presenta algunas novedades. Además, el consejero de Turismo ha adelantado que se están preparando distintas visitas y excursiones complementarias con el propósito de que el destino Ceuta tenga la mayor visibilidad y aceptación posible durante ese fin de semana.
Aunque la prueba no varía en líneas generales, el teniente coronel Araoz ha centrado parte de su intervención en algunas de las modificaciones introducidas con la finalidad de perfeccionar la carrera cívico-militar. Entre ellas, la puesta en marcha de una simbólica categoría joven.
Además, y con la intención de evitar que ciclistas y corredores coincidan en la bajada del parque de San Amaro, Araoz ha indicado que los segundos saldrán a reglón seguido de los primeros, tanto la carrera de 50 kilómetros como la de 20.
En cuanto a las plazas, y aunque podrían incluso alcanzarse las 5.500, la previsión inicial es la siguiente: 1.500 para los 50 kilómetros; 2.400 para la de 20 km; 600 para la prueba de MTB y 250 para las pruebas infantil y juvenil.