Esta mañana contaba fríamente que en Ceuta hay un campeonato de Salvamento y Socorrismo. Parece un simpleza, pero no lo es. Y no lo es desde el momento en que ves a una de las selecciones por la calle antes de la competición. Les pido, «agruparos» y les hago una foto cuando festejaban por su juventud y su ánimos de salvar vidas, ¡Qué bonito!, y posaron sin conocerme pese a lo numeroso del grupo. Yo solo dije que era periodista y los/las junté frente a mí. La foto está aquí: gente ilusionada, a lo mejor no saben todavía lo que supone salvar una vida, a lo mejor no han visto Anatomía de Grey, ni conocen la canción de The Fray.
Absolutamente maravilloso ha sido el momento. No hay nada como la juventud, he pensado en ese instante, pero no hay nada como estos chicos y chicas ilusionados por algo que los mayores quizás no veamos tan claro. Son los que vienen a cuidar de los demás y nunca saben cuándo tendrán que actuar.
La verdad es que no sabía qué escribir sobre esto. Y esto me ha salido en un día gris. Me alegro de encontrarme con gente buena, que quiera aprender de manera consustancial con la vida de los demás. Me alegro de haber topado con vosotros, catalanes y catalanas. Un abrazo fuerte, el mismo que necesitará la gente de vosotros. Sois futuro de vida.
Al resto de grupos, que no he visto, les deseo lo mejor en este Campeonato de España que se celebra en Ceuta. Seréis igual de campeones. Enhorabuena a la consejera de Educación y Cultura, Juventud y Deporte, Pilar Orozco, por propiciar que estas cosas pasen.
Pero vosotras y vosotros, catalanes y catalanas me habéis alegrado el día. Muchas gracias!